Hola amigos, cómo están? Parece que en 1951 la comunidad de secretarias ya tenía su propia publicación, al menos en Inglaterra. Hoy, las "asistentes ejecutivas" (ya no más "secretarias", aunque una de nuestras funciones más importantes sigue siendo, justamente, guardar "secretos") contamos con varios sitios webs que nos apuntalan en nuestras funciones, e incluso existe lo que se conoce como "asistente virtual", una secretaria que asiste a sus jefes en formato online, y que es contratada por hora o para ciertos trabajos en particular, sobre todo por profesionales que no cuentan con oficina propia.
Pero el estereotipo de la secretaria que nadie puede evitar es el de la pulcra muchacha, bien al estilo Mad Men, siempre sonriente, que recibe al jefe con una reverencia y le lleva el café a la oficina. La típica señorita "solterita y con apuro", egresada de las viejas Academias Pitman, grácil dactilógrafa y experta en cubrir a su jefe cuando la patrona llama para controlarlo.
Creo que aún persiste un poco esa idea de la secretaria en el imaginario popular, aunque hoy una verdadera secretaria hace mil cosas, generalmente tiene formación universitaria y puede llegar a ser pieza clave en el negocio. Espero que haya alguna secretaria leyendo y dé fe de mis palabras!
Me causó gracia el título de la revista de la foto, "Office girl" (Chica de oficina), o, como nos dicen aquí en Argentina (a veces despectivamente), "las oficinistas". Yo recuerdo que cuando egresé del secundario y empecé a estudiar Letras, me juraba y me perjuraba que jamás iba a trabajar en una oficina, pero cuando me enganché con la serie Beverly Hills 90210 (la original, la de los '90), descubrí a través del mundo de Amanda (la mala) y de Allison (la buena) que el ambiente de oficina me atraía. Y así fue como comencé a trabajar en oficinas, y aún sigo, 17 años después.
Para todas las queridas "office girls" que pasan por este blog, va dedicado este post con todo mi cariño. Que tengan un hermoso fin de semana, hasta el lunes!
Yo he sido chica de oficina y la pasé genial. Me divierten esas publicaciones antiguas porque recogen los estereotipos que pesaban sobre las mujeres; sea en dónde fuere, siempre impecables y sonrientes, no? Aunque estuvieran fuera del hogar, lo importante era ofrecer una vista agradable.
ResponderEliminarHoy cuando las revistas hacen notas sobre cómo lookearse para la oficina, caen en estilos súper rígidos y acartonados en los que ninguna oficinista actual entra, es como que en cierta medida,se quedaron en el cliché, no te parece?
Que tengas lindo finde, Marian... BEsitos:>
Marian, soy secretaria, asistente, en la actualidad, hace ya muchos años, y trabajo en oficinas dede los 20, tengo 33. Comprendo lo que decis, ser confiables, serias, y guardar secretos, justo hoy me decian la mala cara que tengo a veces, la famosa cara de perro, cero sonriente, acá donde estoy soy más seria por el cargo que tiene mi jefa, soy la cara visible de pedidos y reclamos, y muchos lios. Es un desdoblamiento para mi porque yo hago teatro, pero siemrpe tuve que trabajar para mantenerme. Sueño con no trabajar y qeu la actuación me de de comer, pero no lo veo posible por ahora porque tampoco hago demasiado para eso. Es todo un tema, me quedo sin tiempos! uh, parece una sesión de terapia, perdón! genial el post que me remite tanto a mad men, y como ves a cosas personales lo que escribiste, sos una gran periodista! garcias por el post, un abrazo enorme!
ResponderEliminarMil gracias por pasar chicas! Así es Mati: me cansó la típica producción de moda en la que encasillan a la secretaria con una camisa blanca y una falda lápiz negra, con anteojos y rodete... También usamos otras cosas!!! No lo puedo creer, tenemos varias cosas en común Dorothy: las dos somos secretarias y vivimos de ese oficio aunque nos apasionan otras cosas (si sos de Buenos Aires y si con tu grupo de teatro presentan alguna obra en algún momento, avisame, me encantaría ir a verte y conocerte!!), y las dos asistimos a jefas mujeres, que es todo un tema... A mí siempre me pasó lo mismo: si bien mis verdaderos intereses siempre pasaron por otro lado, nunca me pude despegar del trabajo formal de oficina (salvo cuando trabajé en Utilísima, como asistente de producción). Y todo se convierte en un círculo vicioso: querés hacer otras cosas, pero el trabajo que te da de comer te consume todo el tiempo y la energía, y el tiempo va pasando y las oportunidades de arriesgarse por otra cosa también... Uy, el tema da para rato. Por eso inicié el blog, para hacer algo que me gusta en paralelo con mi trabajo, y estoy pensando en empezar otro que me dé más posibilidades de escribir. Vamos a ver... Un beso para las dos, buen finde!
ResponderEliminarMe gusto tu post,me sentí muy identificada..por suerte mi empresa no es tan estructurada y me puedo vestir como quiero pero tengo muchas ocupaciones juntas y soy la cara visible de la empresa con los clientes. Jamás me hubiese visto como oficinista pero por ahora me gusta bastante el trabajo, lo único negativo son los reclamos, odio que la gente te trate mal y tener que responderles con una sonrisa y la mejor predisposición.
ResponderEliminarBesos!
aquí otra "office girl"! chicas, me identifico tanto lo que cuentan...también tengo 33, soy secretaria y hago bien mi trabajo, con sonrisa incluida porque la actitud mejora energéticamente el ambiente, pero mis pasiones están en otra parte. me fascinan tantas cosas que nunca pude enfocar y decidirme por una...sueño con salir del círculo vicioso y algún día poder dedicarme a algo más afín a mi esencia,, pero el sueldo estable y el miedo a lo desconocido me han mantenido en esta posición hace años. en fin...tema de terapia total! jaja! uds son una inspiración, porque vuelcan esas pasiones en algo que comparten con otros, creo que hace bien al alma! por todas las asistentes, oficio mucho más crucial de lo que suele apreciarse :) beso enorme y buen fin de semana para todas!!!
ResponderEliminarHoy el blog se volvio confesionarioo ( o terapia)!!!que bueno, poder compartir lo que uno siente con otras en tu misma situacion. Y que bueno tener otra actividad en la que volcar otras facetas de la personalidad, el blog, el teatro. melina: buscate algo que te guste, pintar, taller literario,origami.....
ResponderEliminarNunca trabajé de secretaria; en la actualidad trabajo en un grupo de 10 mujeres y tenemos un secrtario, que "corta" con tanto estrogeno. Tiene muy buen caracter y escucha nuestros temas, a veces hay que hacerle algun comentario de futbol para equilibrar!!!! cuando hay un pasante varon se explaya con temas masculinos.
buen finde!!!!!
Gracias chicas por sus comentarios. Fíjense cómo en este pequeño grupo saltaron tantas cosas en común, y cosas que a los demás les cuesta entender. Qué bueno lo del "secretario", Pato!!!! Un beso para todas y gracias nuevamente por pasar!
ResponderEliminarjajaj, me rio de "que bueno lo del secretario!", si Marian, este blog es lo más, fijate como terminamos contando lo que nos pasa! el otro dia le decía al "Conde" como me gustaría conocer a Mariana de Sensación Vintage! lo tenemos pendiente, yo vivo en Coghlan, en capital, y pronto tendré novedades teatrales, asi que como siempre pienso, te voy a avisar! me encantaría conocerte.- Besos!
ResponderEliminarHola Mariana, es cierto lo del estereotipo de las secretarias: la ropa impecable, los tacos bien altos, el cabello perfecto y bien perfumaditas, siempre llevando papeles y sirviendo café.
ResponderEliminarEs un estereotipo machista y lo peor es que algunos empresarios, políticos y tipos con plata siguen contratando chicas por su apariencia física, y las que hacen el trabajo en realidad son mujeres menos llamativas, con estudios, que deben atender trabajo, casa e hijos al mismo tiempo.
Por esa razón me encantó leer los comentarios tuyos y de las chicas para entender más esta profesión.
Un beso grande.
Jazmín.
Yo no soy, ni fui, ni seré chica de oficina jajajaa, pero las saludo a todas con características tan comunes. Bueno sí laburé en Marketing mucho tiempo en oficina (lo único en común)
ResponderEliminarLau