Fotos: las dos primeras, tomadas de la edición de noviembre de Allure. El resto de www.ciaovogue.com (Copyright Condé Nast).
Hola amigos, cómo están? Buen miércoles para todos! Quedé complacida al ver que la edición de noviembre de la revista Allure (publicación norteamericana dedicada a la belleza, del mismo grupo de la Vogue) le dedica una nota a la influencia de la fotografía del francés Guy Bourdin (1928-1991) en el maquillaje extremo.
Y ustedes ya saben cuánto amo el trabajo de Guy Bourdin, a pesar de que el señor no era un canto a la paciencia ni a la amabilidad.
Y si indagan un poco en su trabajo de los '60 y de los '70, verán como Bourdin se adelantó genialmente a la explosión de la música disco de fines de los '70 y a los colores y a la exageración de los '80.
Estas son dos de las fotos actuales que acompañan la nota, un respetuoso homenaje al trabajo de Bourdin (fotos de Nicolas Moore).
Según Allure, el maquillaje de las modelos de Guy Bourdin es un referente para los maquilladores actuales. Es más, cuando las tendencias marcan proliferación de colores pasteles, siempre hay maquilladores que prefieren recurrir a momentos "Guy" (pronunciése "GUI"), es decir, a labios rojos lustrosos, a sombras metálicas y pómulos marcados con fuscia.
Comparto con ustedes algunos de los trabajos de Guy Bourdin de 1975 para la Vogue francesa. Observen la belleza de estas imágenes tomadas de una producción sobre kimonos... El kimono abstraído de su ambiente natural cobra un innegable protagonismo cromático...
Como muchos genios, Bourdin no era un tipo fácil: meticuloso y demandante, el fotógrafo no era de lo más cariñoso con sus modelos, de hecho, las malas lenguas hablan de escenas de maltrato durante sus trabajos. No lo veremos en el corpus fotográfico que elegí para este post, pero sí es verdad que algunas de las imágenes de Bourdin hablan de sometimiento. A pesar de todo esto, Bourdin fue un fotógrafo estrella en una revista consumida por mujeres...
Obsesionado con las pelirrojas maquilladas como puertas, en esta imagen vemos a una auténtica chica Bourdin.
Un dato para caerse de espaldas: en su juventud, Bourdin fue discípulo nada más ni nada menos que de Man Ray, el gran fotógrafo surrealista. A su manera y de acuerdo con los límites que le imponía la fotografía de moda (límites que cruzaba una y otra vez), Bourdin también lograba imágenes surrealistas a través de lo artificial del color, de la potente y calurosa luz de tungsteno que usaba para iluminar y de los escenarios.
Muchas de estas imágenes parecen haber sido tomadas hoy, pero no, datan de hace 40 años... Si en pleno siglo XXI nos parecen actuales, imaginen lo impactante que habrán sido en su época... La imagen de abajo en particular me impresiona: pienso en dos peces fuera del agua luchando entre la vida y la muerte... Dicen que en los '70 muchos lectores de la Vogue francesa esperaban ávidos cada nueva edición sólo por los trabajos de dos fotógrafos: Bourdin y Helmut Newton.
A continuación, dos publicidades de zapatos fotografiadas por Bourdin.
Esta es una de las imágenes más conocidas del fotógrafo maldito: sólo a él se le pudo haber ocurrido semejante composición para vender una marca de zapatos... El zapatito abandonado sobre el césped sintético parece ser el testigo de un crimen, no?
Ay Guy, habrás sido insoportable pero qué genialidad tenías a la hora de armar una imagen. Gracias por tanto talento! Muy bien amigos, espero que les haya gustado el recorrido... Qué les parecieron las imágenes? Espero sus comentarios! Un beso, hasta la semana que viene!!
Un genio Guy, siempre lo vemos con alumnas, es un clásico que nos entrenó el ojo par ver moda, vanguardia pura.
ResponderEliminarDivinas imágenes, Marian:>